Fin de semana en León

El Casco Histórico está cruzado por la Calle Ancha, una calle que fue calzada romana en sus orígenes. A un lado de ella se ubica el Barrio Romántico (del lado de la Catedral) y al otro extremo el Barrio Húmedo.

Sin duda, el producto estrella de León es la cecina, una carne deshidratada similar al jamón, pero elaborada con ternera. Además, los embutidos, los quesos, morcillas y chorizos.

Pero no todo se resume en las tapas. León cuenta con excelentes vinos de dos denominaciones: D.O León y D.O Bierzo

Gracias a su excelencia gastronómica, León fue nombrada Capital Nacional Gastronómica en 2018.

La Plaza Mayor se ubica en el Casco Histórico de León, en pleno Barrio Húmedo, sitio emblemático donde se emplazan la mayor parte de los monumentos de interés histórico y cultural.

Esta Plaza, siguiendo la característica de la mayor parte de las plazas españolas de este tipo, presenta una superficie cuadrangular, cuyo perímetro se viste de galerías y soportales. Allí, se emplazan locales gastronómicos de diversa índole donde sentarse y disfrutar.

Antiguamente este sitio cumplió la función de mercado, donde se adquirían los principales productos cotidianos. En 1654, un incendio destruyó por completo y se reconstruyó siguiendo el diseño que vemos hoy. Hoy en día, el mercado de compra-venta de productos de la zona se continua celebrando todas las semanas.

Alrededor de la plaza se emplazan vistosos edificios de dos plantas con balcón en la primera de ellas.

Situado en la misma Plaza Mayor, este edificio se construyo durante la reconstrucción de la plaza, entre 1674 y 1677.

Aunque se lo relaciona como antiguo edificio del Ayuntamiento, nunca llegó a construirse como tal.

El balcón que domina su fachada, ha servido como tribuna para diversos pregones y discursos políticos.

Su arquitectura respeta las líneas de estilo barroco, siendo típicamente, un palacete con dos torres a sus lados, un ejemplo de la arquitectura civil de España.

Como hechos emblemáticos, desde su balcón Manuel Villapadierna y Castro, exaltó a la población en defensa del Rey Fernando VII.

Se conservan 36 torres de lo que en su momento fueron las murallas, y que hoy delimitan lo que se considera el Casco Antiguo de la ciudad.

Hay sitios que se encuentran muy bien conservados, siendo de las más antiguas de España y dando la idea del trazado cuadrangular del Casco Antiguo.

Su historia se remonta a la época Augusta, en el siglo I A.C., cuando se erigieron como defensa del campamento Romano de Legio VII. En el siglo II y VI, se refuerzan con piedra y canto rodado.

Ya en el siglo XIV, por orden de Alfonso VI, se añaden tramos de muralla de estilo medieval, caracterizadas por construirse con muros dobles.

Para hacer el camino por libre, lo mejor es seguir las chanchas de bronce ubicadas en el suelo. Consta de 8 paradas con sus respectivos atriles a través de los cuales se obtiene información.

Se emplaza sobre lo que, durante la época romana, fueron los baños termales. Más tarde, fue Palacio Real de Ordoño II, quien en agradecimiento por la victoria frente a los árabes, decide erigir allí la catedral.

Luego quedó en estado de abandono tras el paso de Almazor y ciertas empresas bélicas, siendo en el siglo XIII, el momento en el que Fernando I la construye en estilo románico.

Finalmente, será Alfonso X, el Sabio, en el año de 1255, quién patrocinará su levantamiento, tal como la vemos hoy.

Su fachada consta de dos Torres de agujas de diferente altura y un inmenso rosetón, con pasajes bíblicos tallados en su superficie. Todo esto custodiado por la Virgen Blanca desde la puerta principal.

También se la conoce como la Casa de la Luz, gracias a las 125 vidrieras y sus tres rosetones por los que se filtra la luz del sol, llega a deslumbrar a quienes se adentran en su interior.

Los diseños de las vidrieras son verdaderamente magníficos, considerados los mejores de España.

La catedral es accesible para minusválidos, gracias a sus rampas y breves textos explicativos.

Es una obra de estilo neogótico con hermosas torres angulares, realizadas por el genial arquitecto, para albergar la vivienda privada y una fábrica de tejidos, de dos comerciantes leoneses que tenían relaciones con el mecenas de Gaudí, Eusebi Güell.

Es una de las tres obras que el famoso arquitecto realizó fuera de Cataluña, en este caso, entre 1891 y 1894.

La construcción en sí duró sólo 10 meses y según cuenta la historia, se tejieron a partir de allí diversos rumores sobre su fragilidad. A raíz de ello, Gaudí encargó un informe técnico que dio cuenta de su excelente estado. La perfecta conservación da fe de ello.

Es un edificio de 4 pisos, con ático y un sótano. En su momento, albergó la vivienda de los dueños, viviendas de alquiler en los pisos superiores, oficinas comerciales y en el sótano estuvo dedicado al almacenamiento de la empresa textil.

En su fachada se destaca la estatua de San Jorge y el dragón. Cómo nota de color, no hace mucho tiempo se encontraron en el interior de la estatua, los planos originales del edificio, dados siempre por perdidos.

Ha sido declarado Monumento Histórico en 1969.

El museo está dedicado a la historia del edificio, el arte de los siglos XIX y XX, y a la figura de Gaudí.

Se ubica pegado a la casa de Botines en el corazón de la Calle Ancha y perteneció a la familia de los Guzmanes. Juan de Quiñones y Guzmán, obispo de Calahorra, lo mandó a construir sobre lo que había sido un antiguo Palacio mudéjar.

La edificación es de estilo plateresco renacentista y su construcción comenzó en el año 1560, para ser abandonada en el año 1572, sin finalizar.

Llama la atención su fachada de tres pisos, su puerta ricamente decorada, secundada de columnas de estilo jónico y sendas Torres en sus extremos.

Su patio interior es digno de visitar, consta de un espacio rodeado de galerías de doble arquería y bellas vidrieras en la planta superior. En el centro, además, se puede observar un pozo decorativo muy interesante.

Actualmente es sede de la Diputación Provincial. La provincia nació en 1888 y ese año comenzaron las obras que culminaron en 1977.

Se emplaza en pleno casco histórico de la ciudad y permite conocer varios sitios: la Basílica, el Museo y el Panteón de Los Reyes, cada uno con un valor singular.

Se trata de una construcción realizada en el período pre-árabe sobre ruinas de un antiguo templo romano.

Tras ser destruida con el paso de los musulmanes, fue levantada nuevamente por el Rey Alfonso V en el periodo de la Reconquista.

Es durante este reinado cuando se erige el panteón de Reyes, y se decide trasladar aquí los restos de Reyes y Reinas dispersos por la geografía de León.

En el año 1062, también se trasladan los restos de San Isidoro desde Sevilla y se consagra el templo a su advocación.

Además de la Basílica, el panteón de Los Reyes es un lugar muy interesante para visitar por su valor histórico y artístico cultural. Yacen allí 33 miembros de la corte leonesa.

Además, es considerada la Capilla Sixtina del románico, por los frescos y las pinturas conservadas perfectamente en los murales, que decoran ricamente sus seis bóvedas.

Por su parte, el museo también es un sitio para tener en mente: cuenta con piezas de gran valor representativas del arte medieval, y con una biblioteca cuya joya es la Biblia mozárabe que data del año 960.

Inicialmente fue construido como sede de la Orden de Santiago, una de sus funciones principales ha sido la de albergar a los peregrinos que realizaban el camino hasta Santiago de Compostela.

Tras años de abandono, el Rey Fernando el Católico lo mandó a reconstruir en 1537, siguiendo un estilo gótico plateresco. En este caso, como monasterio y convento religioso.

En 1836 dejó de utilizarse como convento, a partir de allí funcionó para diversos fines: cómo prisión (momento en que estuvo encarcelado Francisco de Quevedo durante 4 años), hospital y campo de concentración durante la Guerra Civil.

Actualmente es un parador de lujo, y lo más interesante es que en su interior conserva multiplicidad de muestras que dan cuenta de su rica historia y lo transforma en un museo de salones señoriales.

De este espacio se puede visitar la iglesia de San Marcos, construida en 1531, de estilo gótico y donde se destaca su coro de sillería.

Además, puedes entrar al Museo de León, alojado en la iglesia y que alberga muestra arqueológica de las diferentes épocas.

El MUSAC es uno de los edificios más representativos de la edificación moderna española, reconocida por su estilo vanguardista, que le ha valido el premio Europeo de Arquitectura Contemporánea en 2007.

Fue inaugurado en el año 2005 por el entonces Príncipe de Asturias, y se encuentra emplazado en el barrio de Eras de Renueva.

Cuenta con 5 salas de exposiciones, y su propuesta ha sido constituirse en un auténtico museo del siglo XXI, donde se exponen obras de artes de las últimas generaciones.

Su fachada se compone de más de 3000 paneles multicolores, inspirado en las vidrieras de la catedral.

Se sitúa en El Barrio Romántico de León, siendo una zona verde tranquila en la que te puedes sentar a descansar bajo la sombra de los sauces y tilos.

La construcción del parque comenzó en el año 1972, sobre lo que era en aquel entonces el solar del convento de Agustinas Recoletas.

El parque tuvo muchas utilidades ya que antes de ser un convento fue un cuartel militar.

Un vestigio de la historia más antigua de la ciudad se muestra en este parque, porque se puede ver y acceder a un tramo de muralla de la época romana.

El parque se rodea de los edificios más emblemáticos de la ciudad.

El acceso al parque se puede hacer mediante la calle del Cid, además de por la calle Piloto Regueral.

El Parque rinde homenaje con un busto a Ruben Darío, poeta, periodista y diplomático nicaragüense, el cual fue el máximo representante del modernismo literario de nuestra lengua.

La Plaza de San Marcelo, también conocida como Plaza de las Palomas es una plaza empedrada repleta de edificios históricos.

Junto a la la plaza hay un precioso jardín con una fuente que data de finales del siglo XVIII, que durante los meses de verano suele ser el cobijo de los leoneses.

El Antiguo Ayuntamiento o Palacio de la Paridad es el edificio que preside en esta plaza, el cual fue construido por el arquitecto Juan de Rivero en el año 1585.

El edificio ha pasado de tener diferentes funciones a lo largo de los años; en la actualidad se encuentran las oficinas municipales de la ciudad.

En la propia plaza hay otros edificios en los que merece detenerse como el Palacio de Hernando Villafañe, la Iglesia de San Marcelo o el Palacio de Torreblanca.

Otro de los edificios que vale la pena nombrar es el Palacio de Torre Blanca, en la parte derecha del Antiguo Ayuntamiento, construido en 1672, que ha sido sede de la gobernación, oficina de telégrafos y actualmente es sede del Nuevo Recreo Industrial.

Lo interesante de este sitio es su vitalidad. Durante todo el año se organizan diversas actividades, conciertos, obras de teatro...

Entre los eventos realizados aquí, en la época navideña se levanta un Belén con una pequeña granja a su alrededor. También se instalan diferentes ferias como la feria del libro, de productos artesanales y ferias artísticas.